El objetivo ha sido darle a la funcionalidad la importancia que se merece. Y como siempre, adaptada al presupuesto de los clientes sin olvidar el toque de magia EIRE.

Donde mejor se ve materializado este aspecto es en el salón-comedor, un amplio espacio que se integra con otras estancias como la cocina o el recibidor. La luz moldea el espacio haciéndolo visualmente más amplio y dando una sensación extra de paz y tranquilidad.

Reforzamos esta sensación con la madera, que aporta calidez, o la piedra y el estuco, que le dan fuerza a cada estancia del hogar. La cocina está diseñada de obra con puertas de madera, un toque de lo más mediterráneo.

La entrada con escaleras resulta espectacular, con una fantástica mezcla de materiales en los revestimientos como el microcemento o la piedra, combinados con madera y formas orgánicas que aportan estilo y una sensación muy cálida y acogedora. Esta entrada ha sido diseñada completamente, desde los materiales de los elementos constructivos hasta la iluminación. ¿Se te ocurre una mejor primera impresión que esta?

En los dormitorios predominan los tonos luminosos y neutros, resultando estancias muy sencillas y relajadas, pero también cálidas. Se han diseñado a medida los armarios empotrados de madera roble y detalle de textil en las puertas.

Si tuviéramos que definir este proyecto con palabras serían coqueto, acogedor, discreto, limpio y armonioso.